Corazón de Melón

Fea. Bruto. Quisiera oler el mar ahora, y sonreír con los ojos cerrados. Que me lleves en una moto destartalada, o que me hagas correr en sandalias. Las cosas pasan muy pocas veces en la vida, por no decir que sólo pasan una vez: ni que hablar de las personas. Cada día puede ser un nuevo capítulo, un nuevo tomo. Hay infaltables hojas para llenar de hechos y risas, y no quiero estancarme. Quiero seguir, quiero no complicar lo que es muy sencillo. Porque jamás estuve más segura en mi vida, estoy segura de que el olor a lluvia me relaja el cuerpo, que las luces de las velas me hacen pensar en profundo, que soy abuela sí, por preferir quedarme viendo una película de esas que me hacen llorar (por ser tan tontamente buenas) antes que salir a una fiesta o algo más. Que prefiero mil veces hundir mis pies en la arena que en unos buenos tacos stileto (¿se escribe así?). Tengo tantas ganas de viajar y conocer, no quiero ser tímida, y si lo soy me gustaría que alguien me empujara y me retara para animarme a hacer todo eso que me hace latir fuerte el corazón. Para no arrepentirme de nada. Amo estos días así, en los que me doy cuenta de las cosas, las madrugadas tranquila. Sí, deberia estudiar, pero para eso tengo tiempo.

"Quizá éste no era nuestro tiempo." "No podes terminar algo que nunca empezó." "Que no se corte, eh." "Prefiero que seamos amigos." "No soy ella." "No es que no me gustas, es que ella me gusta más." "¿Qué tiene ella que no tenga yo? Digo, aparte de tu corazón." "No te voy a escribir más."

Colecciono frases, pero no necesito escribírmelas, las tengo tatuadas entre mi piel y mi carne. Tengo una memoria de elefante. Sí, de Elefante.

"Yo nunca me olvido de nada, gordo."