domingo, marzo 4

I lost my heart, I lost my mind: Without You

"No queres entrar un rato a mr. jones? Y nos vamos juntos"
"Quiero estar un rato convos dale venite"
"Estoy afuera te espero?"
"Si queres te podes dar una vuelta mañana por la playa jugamos a partir de las 9 me gustaría verte"


Sentir los labios en el hombro; la arena entre los dedos; el idioma inentendible; la mentira en la puerta; posible como el viento y la excepción de Creer. Mirarte a los ojos, verte despeinada en tal reflejo y no poder imaginar nada de otra forma. El colectivo es rutina, las minifaldas y las pieles bronceadas otro tanto, pero símbolo metafórico de la locura veraniega. Dormir solo y dormir con extraños, creer en el amor y en la libertad; en las pieles desnudas muy en lo profundo del mar. Que el viento comunique por todos los medios a dos personas y el destino corone una noche en un diario sin ningún sentido. "No te sientas identificado si alguna vez te ves publicado," dijo ella.
Insensibilizar un hombro; y la piel gallina del frío se vuelve caliente con el calor del estómago y de aún más abajo; cuando todo está en la cabeza. Abajo el amor dicen algunos y yo digo: atravesalo. Just like across the universe; ups, perdón, cierto que maternalmente deberías ser experto inglés pero para nada lo sos: ¿dónde estarás? Querías hacerlo todo conmigo y yo sonreía y decía que no, y dejaba que mi pulóver se deslizara recorriendo mi brazo, dejando piel descubierta. Y te volvías loco, o eso le decías a todas. Acunar tu corazón y volverme aquellas rubia imborrable de tu vida, quien casi te entregó lo más preciado en una mujer.
Fuiste un metro noventa y tres de dulces incitaciones y grandes expectativas. Tus ojos me demostraron la fragilidad que no podías expresar con palabras y tus brazos quería inmortalizar en mi cadera y jamás dejarte ir; desde la primera vez que rozaste un beso.
Y ahora, ahora sólo sos palabras como si te hubiera soñado por una noche de alcohol y con mis tacos aún puestos. Rusito, rusito, algo me dice que te voy a volver a ver, y está vez poder irme con vos sin importarme volver a verte después.
pd. me debes los pochoclos del cine todavía, eh.

Nunca olvido.

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